La delegación, compuesta por Taib Fassi Fihri, ministro delegado para Asuntos Exteriores y Cooperación, Fouad Ali El Himma, ministro delegado para Interior y Mohamed Yassine Mansouri, director general de la Dirección General de Estudios y Documentación (DGED, servicio de inteligencia exterior), se ha reunido con el ministro de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, y el secretario del Consejo de Seguridad Nacional, Igor Ivanov.
Con este motivo, los responsables marroquíes han subrayado que este proyecto, fruto de amplias e intensas consultas llevadas a cabo a nivel nacional y local, es conforme a la legalidad internacional y al proceso de apertura política y las reformas sociales que experimenta Marruecos y constituye también una contribución responsable al relanzamiento de la integración magrebí y la consolidación de la paz y la seguridad regionales.
Las entrevistas han evocado también la manera con la cual la dinámica positiva creada por esta iniciativa constructiva podría ser proseguida en el marco de las Naciones Unidas para llegar a un arreglo político, definitivo y mutuamente aceptable a este conflicto regional sobre la base de la propuesta marroquí.
Según explicaron responsables gubernamentales, este proyecto de autonomía se basa en tres constantes fundamentales: el respeto de la soberanía y la unidad de Marruecos, la toma en consideración de las especificidades sociales y culturales del Sahara y la conformidad con las normas y modelos internacionales en materia de autonomía.
La visita de la delegación marroquí a Moscú entra en el marco de una gira internacional que la condujo a Paris, Madrid, Washington, Londres y Berlín para informar a los responsables de estos países de la propuesta marroquí.