Las minas mataron a 534 personas en el Sahara marroquí desde 1975, de ellos 494 militares y 40 civiles, según cifras proporcionadas la semana pasada por las autoridades marroquíes.
Darif estimó que estas cifras son susceptibles de aumentar y subrayó los esfuerzos desplegados por las autoridades marroquíes para eliminar las minas de esta región.
Expresó también la voluntad de su asociación de contribuir a la campaña de sensibilización prevista a favor de los habitantes de la región, en especial los ganaderos, los pastores y los alumnos.
Las últimas víctimas mortales por la explosión de minas se produjeron la semana pasada. Se trata de un parlamentario, un presidente de una comuna rural y una niña.
Según las autoridades marroquíes, los artefactos, plantados de manera "salvaje y anárquica" por los separatistas del +Polisario+ y los militares argelinos en esta región en los años 70 y 80, causaron 1.610 heridos (1.439 militares y 171 civiles).
Un total de 64.722 minas (20.469 anticarro y 44.253 antipersonales) han sido destruidas desde el comienzo de las operaciones de eliminación de minas en 1980.
El Sahara marroquí fue escenario en los años 70 y 80 de enfrentamientos armados entre Marruecos y los separatistas del +Polisario+, apoyados por Argelia. Las hostilidades cesaron cuando se decretó un alto el fuego el 6 de septiembre de 1991 bajo los auspicios de la ONU.