Los participantes en esta conferencia, organizada por Interfaith International, el Internacional Democrático del Centro y la Unión de la Acción femenina, consideró que solamente esta iniciativa de autonomía es susceptible de sacar el conflicto del Sahara del estancamiento y permitir la reactivación de la edificación del Gran Magreb para la seguridad y el bienestar de los pueblos de la región.

Sidati El Gallaoui, ex representante del polisario en Italia, presentó los antecedentes del conflicto del Sahara, secuela de la guerra fría, y destacó que el proyecto de autonomía responde a las reivindicaciones de las poblaciones saharauies y les ofrece una amplia gestión de sus asuntos internos.

Señaló que la persistencia del conflicto del Sahara frena la construcción del Magreb, y precisó que la solución de este conflicto permitirá a los cinco países de este agrupamiento regional realizar el desarrollo económico y social, ahorrar a la zona el tormento de la inestabilidad y frustrar el recrudecimiento de las amenazas terroristas, tráfico de armas y de seres humanos.

Por su parte, Abadilah Semlali, del Internacional Democrático del Centro, llamó la atención de la asistencia al drama vivido por las poblaciones secuestradas en los campos de Tinduf, y denunció el secuestro colectivo de esta población llevado a cabo por el polisario y la seguridad militar argelina a mediados de los años setenta.

Agregó por otra parte que varias familias de desaparecidos saharauíes le encargaron trasladar su angustia a las instancias de los derechos humanos en Ginebra para sensibilizar a la comunidad internacional por sus sufrimientos, y llamó a arrojar luz sobre estas desapariciones forzadas, que representan una violación flagrante del derecho humanitario internacional.

A su vez, Saadani Maoulainine, ex deportada por el polisario en Cuba describió los sufrimientos físicos y morales que le causó a ella y a muchos niños esta separación familiar, y denunció las violaciones sistemáticas de los derechos humanos en los campos de Tinduf por el polisario, antes de lanzar un llamamiento a la comunidad internacional para que cesen definitivamente estas prácticas por la vuelta de estas poblaciones a la madre patria.

Moulay Ahmed M' Ghizlat, miembro del Consejo real consultivo para los asuntos del Sahara (CORCAS) explicó, por su parte, que la creación de este Consejo traduce la voluntad de Marruecos de cerrar de manera democrática el expediente del Sahara, permitiendo a las poblaciones de esta región administrar sus propios asuntos.

El proyecto de autonomía, elaborado por el CORCAS, dijo, ofrece la oportunidad de reconciliación y arreglo de la cuestión del Sahara sin que haya vencedor ni vencido.

Esta conferencia, marcada por la presencia de un gran público, se celebró al margen de la 10ª sesión del Consejo de los derechos humanos de la ONU, que se celebra del 2 al 27 de marzo.