"Esta iniciativa responde a las esperas de la comunidad internacional" para cerrar definitivamente el conflicto del Sahara, que opone desde 1975 Marruecos al "Polisario", apoyado por Argelia, dijo El Fassi al presentar hoy la declaración gubernamental ante los miembros de la Cámara de Representantes para obtener su confianza, tras el nombramiento del Gobierno el pasado 15 de octubre por SM el Rey Mohammed VI.
El Fassi expresó también la "determinación" del Gobierno de reforzar el desarrollo económico y social y proseguir los diferentes proyectos lanzados en las provincias del Sur, tomando en consideración las especificidades regionales y en coordinación con los diferentes actores locales.
"El objetivo es promover el empleo, la inversión y los partenariados productivos en los sectores de vivienda, modernización del desarrollo urbano, además del refuerzo de la política de proximidad y la mejora de las prestaciones a favor de los ciudadanos" de esta región, explicó.
Tras haber reafirmado que la cuestión del Sahara es una de las "constantes fundamentales" que gozan de la unanimidad nacional, el Primer ministro añadió que el Gobierno seguirá movilizando todos sus medios políticos y diplomáticos para aportar más apoyo internacional a la propuesta marroquí.
El Fassi reiteró que Marruecos está siempre dispuesto a negociar la "autonomía y nada más que la autonomía" y llamó a las partes concernidas, particularmente Argelia, a aprovechar esta "oportunidad histórica" privilegiando el espíritu de fraternidad, buena vecindad y completar la edificación de la Unión del Magreb Árabe (UMA, compuesta por Marruecos, Argelia, Libia, Mauritania y Túnez).
Marruecos presentó en abril pasado a la ONU un proyecto de autonomía para la región del Sahara como plataforma de negociación para hallar una solución definitiva a esta cuestión.
El Consejo de seguridad había aprobado el mismo mes la resolución 1754, en la cual saludó los esfuerzos "creíbles" y "serios" de Marruecos, en referencia al plan marroquí y llamó a las dos partes a entablar negociaciones "sin condiciones previas" y de "buena fe".
Marruecos y el "Polisario" celebraron el verano pasado dos rondas de negociaciones en Estados Unidos, bajo los auspicios de la ONU, en presencia de Argelia y Mauritania en su calidad de países vecinos, y se pusieron de acuerdo para retomar el diálogo en una fecha y un lugar que serán fijados con posterioridad.