Marruecos "recurre a los Estados miembros de las Naciones Unidas para lanzar una fuerte señal política de apoyo a las negociaciones" que ha iniciado con el "Polisario"  "a fin de protegerlas y preservar sus oportunidades de éxito, al inscribir la acción de la cuarta Comisión en el marco de los esfuerzos desplegados, con éxito, por el Consejo de Seguridad", declaró Sahel ante esta comisión de la Asamblea General de la ONU.

Para el diplomático marroquí, el asunto del Sahara, que opone desde 1975 Marruecos a los separatistas del "Polisario" apoyados por Argelia, se encuentra hoy día en un contexto "tan nuevo como prometedor", conforme a la resolución 1754, aprobada por unanimidad el 30 de abril pasado.

A través de esta resolución, agregó, el Consejo de Seguridad "ha creado un nuevo proceso político de negociación acabando con las iniciativas anteriores y poniendo fin, a un impasse que dura desde 2003".

Tras  recordar las señales políticas fuertes enviadas  por la Asamblea  General  y el Consejo de seguridad el año pasado, que  animaban al Reino a finalizar y  presentar su " Proposición para la negociación de un estatuto de autonomía para la región de Sáhara ",  indicó que esta iniciativa se había revelado a la altura de las esperas de la comunidad internacional, creando una nueva dinámica.

Sr. Sahel recordó, por otra parte, la lucha larga de Marruecos por el recubrimiento de su integridad territorial, subrayando que " sin injerencias exteriores, motivadas por ambiciones hegemónicas, que hipotecaron la construcción de Magreb ", este proceso habría sido acabado completamente.

A pesar de esta búsqueda larga, que privilegió la vía de la negociación con los ex-potencias coloniales, el Reino,  solicitó la mediación de la ONU y no cesó,  después, de dar pruebas de su cooperación con éste organismo, para  un arreglo definitivo del desacuerdo sobre el Sahara, cuyo carácter anacrónico y artificial admiten algunos hoy .

Sr. Sahel, quien  recordó el fracaso de las soluciones preconizadas antes por la ONU para resolver este desacuerdo,  porque son inaplicables por las Naciones Unidas mismas, como  fue el caso para el Plano de arreglo , o por no haber recogido el consentimiento de las partes, la condición sine qua non  para su puesta en marcha, indicó que Marruecos había decidido, frente a este callejón sin salida, responder favorablemente tanto a la llamada del Consejo como a las esperas de la Comunidad internacional sometiendo su Proposición de la negociación de un estatuto de autonomía para la región de Sahara.

Tras haber resaltado los esfuerzos de Marruecos para la elaboración de su iniciativa de autonomía para el Sahara, calificados de "serios" y "creíbles" por el Consejo de seguridad, Sahel llamo a la cuarta comisión a aprovechar "con responsabilidad, serenidad y seriedad" la dinámica creada por esta iniciativa que presentó el Reino en abril pasado a la ONU, para encontrar una solución política y mutuamente aceptable a este diferendo regional".